Gobierno Regional y sector aéreo acuerdan hoja de ruta para fortalecer el Aeropuerto La Florida

La iniciativa busca priorizar inversiones en infraestructura, seguridad y extensión horaria, en coordinación con ministerios, municipios y la industria, asegurando mayor conectividad para la región.
El gobernador regional, Cristóbal Juliá, advirtió con firmeza la situación crítica que enfrenta el Aeropuerto Internacional La Florida, en La Serena, y anunció gestiones inmediatas para exigir respuestas al nivel central y coordinar acciones con la industria aérea. La autoridad sostuvo en Santiago una reunión con representantes de la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA) y la Asociación Chilena de Líneas Aéreas (ACHILA), quienes coincidieron en que el terminal “ya no da para más”.
Desde 2019, la oferta de asientos en La Florida aumentó en un 51 %, con más de 17 vuelos diarios y seis rutas regulares, lo que lo convierte en uno de los aeropuertos de mayor crecimiento del país. Sin embargo, su infraestructura y gestión operativa están al límite: el cierre a las 23:00 horas provoca cancelaciones o desvíos ante mínimos retrasos; solo existen dos máquinas AVSEC para control de seguridad, generando un cuello de botella que restringe el flujo de pasajeros; y el sistema de aproximación depende de alta visibilidad, sin contar aún con un ILS que permita operar con niebla o baja nubosidad.
“Estamos reuniéndonos con todos aquellos que tienen que aportar de manera relevante en el desarrollo del aeropuerto de La Serena, que ya no da para más con todos los problemas que esto trae”, afirmó el gobernador Cristóbal Juliá, quien añadió: “Con las propuestas que estamos desarrollando esto podría mejorar en un 80% de lo actual. Eso permitiría fortalecer el turismo, el comercio y también la movilidad de quienes trabajan fuera de la región”.
La industria respalda el diagnóstico. Helen Kouyoumdjian, country manager de IATA en Chile, señaló: “Tenemos un objetivo común que es mejorar la conectividad de la Región de Coquimbo. Hay un interés real de las aerolíneas por aumentar sus vuelos hacia esta zona, pero para que eso ocurra necesitamos medidas concretas de corto plazo, como extender los horarios de operación y contar con un mejor sistema de aterrizaje. Estos cambios no solo benefician a la aviación, también fortalecen al turismo, a las personas que viajan por trabajo y a toda la economía regional, porque mejorar la conectividad significa abrir más oportunidades de desarrollo”.
Por su parte, Gabriela León, vicepresidenta de ACHILA, agregó: “Estamos muy preocupados por la conectividad de la región y creemos que hay varias acciones inmediatas que pueden marcar la diferencia. La extensión horaria es clave, porque permitiría que el aeropuerto no tenga un funcionamiento tan acotado y se reduzca el riesgo de cancelaciones o desvíos. Además, la implementación de un nuevo sistema instrumental, como un ILS o GLS, permitiría mejorar las aproximaciones a la pista en condiciones climáticas adversas. Estas son mejoras que van en directo beneficio de los pasajeros, porque hacen más segura y confiable la operación, y abren la posibilidad de que la región siga creciendo en conectividad”.
El gobernador anunció que el Gobierno Regional encabezará una mesa interinstitucional público-privada para coordinar a ministerios, DGAC, JAC, municipios, parlamentarios y la industria, con el objetivo de priorizar medidas en infraestructura, seguridad y extensión horaria. Además, no descartó que a futuro se evalúe un nuevo aeropuerto en Tongoy, como alternativa estratégica para el desarrollo económico y turístico de la región.
“El aeropuerto de La Florida puede sostener mejoras en el corto y mediano plazo, pero en una visión de futuro debemos pensar en un terminal internacional que permita que la región salga al mundo y se desarrolle como todos queremos”, concluyó Juliá.
Como conclusión de la reunión, quedó claro que el Aeropuerto La Florida no resiste seguir operando con “parches”. Sin un ILS que permita aterrizar con niebla, la región seguirá perdiendo conectividad; sin la calle de rodaje Alfa, los tiempos de espera en pista seguirán aumentando y restando capacidad operativa; y mientras solo dos máquinas AVSEC deban procesar a miles de pasajeros diarios, la seguridad será el principal cuello de botella.