Denuncian mala gestión y falta de transparencia en Cooperativa Capel

Un grupo de asociados acusa a la actual administración de falta de transparencia, bonos millonarios para ejecutivos y bajos pagos por uva.
Es una situación que se vive desde hace años en la Cooperativa Agrícola Pisquera Elqui Limitada (Capel), divisiones por los altos sueldos y bonos millonarios de los ejecutivos, bajo pago del precio de la uva y además el constante «fantasma» de la quiera. En este sentido un grupo de asociados se organizó para enfrentar a la actual administración, liderada por el presidente del Consejo de Administración, Egidio Rigotti, acusando una mala gestión, falta de transparencia y de privilegiar a los ejecutivos por sobre los agricultores.
Así lo informó el medio nacional CIPER Chile, pues este sábado 31 el Consejo de Administración de la Cooperativa Capel convocó a una junta general para votar respecto a la autorización para pedir un millonario préstamo, que según dos fuentes conocedoras de la operación, obligaría a dejar en garantía parte del patrimonio de la pisquera.
Los asociados opositores temen que esto conduzca a la quiebra de la cooperativa, lo que según tres fuentes relacionadas con los agricultores que hablaron con CIPER, se debe al temor de que la empresa no pueda solventar sus deudas, ya que afirman que mientras los ingresos para los asociados disminuyen, los jefes administrativos reciben bonos millonarios.
Además, desde febrero de 2020, los agricultores asociados reclaman por el bajo valor que se les paga por kilo de uva, el que actualmente es de $208 por kilo, abonado en 12 cuotas, por lo que por una producción promedio de 10.000 kg, un asociado recibiría alrededor de $173 mil mensuales por la venta de su producto.
Respecto a los bonos, específicamente los llamados KPI, personas conocedoras del funcionamiento interno indicaron a CIPER que estos son una recompensa por desempeño administrativo, pero los cooperados denuncian que no se les informa sobre los requisitos ni sus montos. Una acta de junta de socios de marzo de 2022 registró que el entonces gerente general podía recibir hasta dos sueldos como bono. El citado medio consultó a Capel sobre el cálculo y los beneficiarios, pero la cooperativa rehusó entregar esos datos.
Los asociados disconformes también exigen mayor transparencia del Consejo de Administración, gerentes y ejecutivos, además de eficiencia y ahorro en gastos. Citando una auditoría especial realizada por la consultora Price en 2020, mencionada en una junta de socios, donde se informó de un “descontrol por parte de la Gerencia Comercial Capel” y que “muchos de los acuerdos comerciales eran informales, (suscritos) sólo (mediante) correos electrónicos”.
Una profunda división atraviesa a la Cooperativa Agrícola Pisquera Elqui Limitada (Capel), ya que un grupo de asociados se organizó para enfrentar a la actual administración, liderada por el presidente del Consejo de Administración, Egidio Rigotti, acusando una mala gestión, falta de transparencia y de privilegiar a los ejecutivos por sobre los agricultores.
Según lo que reportó el medio CIPER Chile, este sábado 31 el Consejo de Administración de la Cooperativa Capel convocó a una junta general para votar respecto a la autorización para pedir un millonario préstamo, que según dos fuentes conocedoras de la operación, obligaría a dejar en garantía parte del patrimonio de la pisquera.
Los asociados opositores temen que esto conduzca a la quiebra de la cooperativa, lo que según tres fuentes relacionadas con los agricultores que hablaron con CIPER, se debe al temor de que la empresa no pueda solventar sus deudas, ya que afirman que mientras los ingresos para los asociados disminuyen, los jefes administrativos reciben bonos millonarios.
Además, desde febrero de 2020, los agricultores asociados reclaman por el bajo valor que se les paga por kilo de uva, el que actualmente es de $208 por kilo, abonado en 12 cuotas, por lo que por una producción promedio de 10.000 kg, un asociado recibiría alrededor de $173 mil mensuales por la venta de su producto.
Respecto a los bonos, específicamente los llamados KPI, personas conocedoras del funcionamiento interno indicaron a CIPER que estos son una recompensa por desempeño administrativo, pero los cooperados denuncian que no se les informa sobre los requisitos ni sus montos. Una acta de junta de socios de marzo de 2022 registró que el entonces gerente general podía recibir hasta dos sueldos como bono. El citado medio consultó a Capel sobre el cálculo y los beneficiarios, pero la cooperativa rehusó entregar esos datos.
Los asociados disconformes también exigen mayor transparencia del Consejo de Administración, gerentes y ejecutivos, además de eficiencia y ahorro en gastos. Citando una auditoría especial realizada por la consultora Price en 2020, mencionada en una junta de socios, donde se informó de un “descontrol por parte de la Gerencia Comercial Capel” y que “muchos de los acuerdos comerciales eran informales, (suscritos) sólo (mediante) correos electrónicos”.
La situación financiera de Capel, según los balances revisados por CIPER, muestra un panorama desafiante, ya que el margen de explotación disminuyó significativamente entre 2019 y 2024. En el mismo período, el gasto en Administración y Ventas se mantuvo alto, con un promedio de poco más de $10 mil millones. La deuda de Capel con sus filiales también aumentó considerablemente, pasando de $17.306.875.000 en 2019 a $28.256.088.000 el año pasado. La Viña Francisco de Aguirre S.A. concentra casi la totalidad de esta deuda relacionada.
Los pagos a los cooperados que deciden retirarse y solicitan la devolución de su cuota de incorporación también han sido motivo de conflicto, ya que mientras en 2023 Capel pagó más de $3.700 millones por este concepto, un grupo de cooperados envió una carta en enero del 2025 pidiendo que se corrija el “abuso” de no pagar el 100% del capital social a los socios salientes, e incluso, dos fuentes cercanas a la operación confirmaron a CIPER que, en varios casos, se negoció y pagó solo el 50%.
La administración de Capel explicó en su Memoria Anual que el 2024 fue “desafiante” debido a la sequía y la vendimia más baja en volumen de la historia. Sin embargo, los balances revisados por CIPER muestran que el año de inflexión económica fue 2019, con una pérdida de más de $10 mil millones y aunque la cooperativa volvió a registrar ganancias en los años posteriores, los gastos han superado las ganancias desde 2022.
La tensión interna quedó al descubierto hace 3 semanas cuando un socio infiltrado en el grupo de WhatsApp de los opositores intentó enviar información al presidente del Consejo de Administración, pero por error reenvió el mensaje al mismo grupo, quedando expuesto.
Una profunda división atraviesa a la Cooperativa Agrícola Pisquera Elqui Limitada (Capel), ya que un grupo de asociados se organizó para enfrentar a la actual administración, liderada por el presidente del Consejo de Administración, Egidio Rigotti, acusando una mala gestión, falta de transparencia y de privilegiar a los ejecutivos por sobre los agricultores.
Según lo que reportó el medio CIPER Chile, este sábado 31 el Consejo de Administración de la Cooperativa Capel convocó a una junta general para votar respecto a la autorización para pedir un millonario préstamo, que según dos fuentes conocedoras de la operación, obligaría a dejar en garantía parte del patrimonio de la pisquera.
Los asociados opositores temen que esto conduzca a la quiebra de la cooperativa, lo que según tres fuentes relacionadas con los agricultores que hablaron con CIPER, se debe al temor de que la empresa no pueda solventar sus deudas, ya que afirman que mientras los ingresos para los asociados disminuyen, los jefes administrativos reciben bonos millonarios.
Además, desde febrero de 2020, los agricultores asociados reclaman por el bajo valor que se les paga por kilo de uva, el que actualmente es de $208 por kilo, abonado en 12 cuotas, por lo que por una producción promedio de 10.000 kg, un asociado recibiría alrededor de $173 mil mensuales por la venta de su producto.
Respecto a los bonos, específicamente los llamados KPI, personas conocedoras del funcionamiento interno indicaron a CIPER que estos son una recompensa por desempeño administrativo, pero los cooperados denuncian que no se les informa sobre los requisitos ni sus montos. Una acta de junta de socios de marzo de 2022 registró que el entonces gerente general podía recibir hasta dos sueldos como bono. El citado medio consultó a Capel sobre el cálculo y los beneficiarios, pero la cooperativa rehusó entregar esos datos.
Los asociados disconformes también exigen mayor transparencia del Consejo de Administración, gerentes y ejecutivos, además de eficiencia y ahorro en gastos. Citando una auditoría especial realizada por la consultora Price en 2020, mencionada en una junta de socios, donde se informó de un “descontrol por parte de la Gerencia Comercial Capel” y que “muchos de los acuerdos comerciales eran informales, (suscritos) sólo (mediante) correos electrónicos”.
La situación financiera de Capel, según los balances revisados por CIPER, muestra un panorama desafiante, ya que el margen de explotación disminuyó significativamente entre 2019 y 2024. En el mismo período, el gasto en Administración y Ventas se mantuvo alto, con un promedio de poco más de $10 mil millones. La deuda de Capel con sus filiales también aumentó considerablemente, pasando de $17.306.875.000 en 2019 a $28.256.088.000 el año pasado. La Viña Francisco de Aguirre S.A. concentra casi la totalidad de esta deuda relacionada.
Los pagos a los cooperados que deciden retirarse y solicitan la devolución de su cuota de incorporación también han sido motivo de conflicto, ya que mientras en 2023 Capel pagó más de $3.700 millones por este concepto, un grupo de cooperados envió una carta en enero del 2025 pidiendo que se corrija el “abuso” de no pagar el 100% del capital social a los socios salientes, e incluso, dos fuentes cercanas a la operación confirmaron a CIPER que, en varios casos, se negoció y pagó solo el 50%.
La administración de Capel explicó en su Memoria Anual que el 2024 fue “desafiante” debido a la sequía y la vendimia más baja en volumen de la historia. Sin embargo, los balances revisados por CIPER muestran que el año de inflexión económica fue 2019, con una pérdida de más de $10 mil millones y aunque la cooperativa volvió a registrar ganancias en los años posteriores, los gastos han superado las ganancias desde 2022.
La tensión interna quedó al descubierto hace 3 semanas cuando un socio infiltrado en el grupo de WhatsApp de los opositores intentó enviar información al presidente del Consejo de Administración, pero por error reenvió el mensaje al mismo grupo, quedando expuesto.
Además del crédito, en la junta de este sábado también debía votarse la posible venta de 6 propiedades para conseguir liquidez, incluyendo la Planta de Sotaqui, que fue paralizada en 2023 para optimizar costos y preparar su venta.
CIPER Chile intentó obtener la versión del Consejo de Administración de Capel sobre estos antecedentes y la propuesta de crédito, pero la entidad se rehusó a referirse al tema, indicando que su rendición de cuentas se realiza “directamente ante quienes corresponde: nuestros socios”.
La División de Asociatividad y Cooperativas del Ministerio de Economía es el organismo encargado de fiscalizar a las cooperativas. Sin embargo, CIPER, al solicitar vía Ley de Transparencia copias de balances y actas de juntas entre 2019 y 2024, sólo recibió registros de las reuniones de febrero de 2020 y octubre de 2021.
Fuente: Diario El Día; Ciper Chile.