Economía

Usuarias de programa para mujeres campesinas intercambian experiencias como floricultoras en Altovalsol

El Programa de Formación y Capacitación para Mujeres Campesinas anualmente entrega herramientas y contenidos a cerca de 3.000 mujeres a lo largo del país.

Mejorar la calidad de vida de mujeres campesinas provenientes de familias rurales, es el objetivo principal del Programa de Formación y Capacitación para Mujeres Campesinas, realizado en el marco del convenio entre Fundación PRODEMU y el Instituto de Desarrollo Agropecuario, INDAP, que durante tres años les entrega herramientas económicas, productivas y sociales, con la finalidad de que desarrollen competencias como productoras en su rubro. En ese contexto, dos agrupaciones de las localidades Altovalsol y María Elena en La Serena, que se dedican a la producción de flores, especialmente a la plantación de Lilium y claveles, se reunieron para intercambiar experiencias, como parte de una gira técnica, instrumento que les permite conocer a emprendedoras que se dedican al mismo rubro y ampliar sus conocimientos para seguir proyectando su negocio.

En la oportunidad, Francisca Valenzuela, integrante del grupo El Paraíso de las Flores de María Elena, quien está cursando segundo año del programa, señaló que “intercambiar experiencias con otras usuarias del convenio es enriquecedor, porque nosotras también estuvimos en esa posición, donde teníamos incertidumbre sobre lo que se venía y estábamos ansiosas. No hay que ser egoísta con las mujeres que están recién emprendiendo, hay que orientarlas y esperar que les vaya tan bien como a nosotras”. Por su parte, Verónica Díaz, integrante del grupo Flores de Altovalsol de primer año, agregó que “este tipo de instancias nos incentivan y entusiasman más con este proyecto que decidimos iniciar, porque ellas empezaron de la misma forma y ver que están teniendo éxito con sus flores nos da fuerza y nos hace ver que si se puede salir adelante”.

En relación a su incorporación al programa y a la ayuda entregada por ambas instituciones, Valenzuela cuenta que “ingresamos al curso a través de Servicio País, que nos derivó a la fundación y esto ha significado una gran oportunidad para nosotras, porque por nuestra cuenta no contábamos con los recursos para realizar un emprendimiento de esta envergadura y gracias a esta iniciativa y los fondos entregados, tenemos un invernadero y estamos en proceso de construcción de otro,”. El ingreso del grupo Flores de Altovalsol fue de forma similar, Díaz indica que “desde el Municipio me derivaron a PRODEMU, donde me informaron de este programa para mujeres campesinas, así que postulé con mis hermanas y nos embarcamos en este proyecto, donde nos están entregado los conocimientos necesarios para sacar adelante nuestra unidad productiva”.

Por su parte, Carla Miranda, directora regional de Fundación PRODEMU, expresó que “el Gobierno de la Presidenta Michelle Bachelet ha impulsado fuertemente el emprendimiento femenino a través de distintos instrumentos y programas. En ese contexto, tanto PRODEMU como INDAP se presentan como un aliado para aquellos grupos de mujeres que quieran emprender de manera asociativa. Por otra parte, las giras técnicas son una oportunidad para que las usuarias del convenio conozcan distintas experiencias -conforme al rubro que están ejerciendo- y se den cuenta que es una iniciativa productiva que se puede sustentar en el tiempo y que en un futuro les permitirá generar ingresos. El rubro de las flores está creciendo y es fundamental que las mujeres amplíen sus conocimientos conociendo a otras floricultoras”.

La principal característica de estas iniciativas productivas es la asociatividad, la capacidad para complementarse colectivamente buscando el beneficio común. De esta forma, los grupos de mujeres que trabajan en equipo, se coordinan y capacitan para levantar un emprendimiento, desarrollando conocimientos y competencias en liderazgo, comunicación efectiva y desarrollo de proyectos.

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